Crisis energética: Millonarios contratos generan incertidumbre y desconfianza
El gobierno ecuatoriano sigue apostando por generadores de origen cuestionado, mientras la falta de transparencia y el incumplimiento de plazos agravan la situación.
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El 18 de noviembre, CELEC anunció la firma de cuatro nuevos contratos por un total de 467 millones de dólares para generar más de 632 megavatios en un segundo bloque de generación eléctrica. Sin embargo, la sombra del fracaso del primer bloque emergente persiste, ya que tres de los cuatro contratos, incluidos dos entregados a la empresa Progen por un monto de 149 millones de dólares, generan serias dudas. El primer contrato debía entrar en operación hace semanas, mientras que el segundo se esperaba para finales de este mes. Según el consultor energético Pablo Arias, el fracaso parece inevitable, ya que la falta de investigación y garantías sobre los proveedores hace que la situación sea insostenible.
La apuesta por Austral Technical Management: ¿Una jugada arriesgada?
Por otro lado, el gobierno sigue confiando en la llegada de generadores adquiridos a la empresa Austral Technical Management (ATM) por 89 millones de dólares, de los cuales ya se han pagado 69 millones en anticipo. Sin embargo, el paradero de los generadores sigue siendo incierto. En este contexto, es relevante destacar que ATM, una empresa constituida en Uruguay apenas cuatro meses antes de ser contratada por Ecuador, firmó el contrato de emergencia en agosto de 2024. Pocos días después, otorgó un poder a la empresa VG Blugen, registrada en la misma dirección de un edificio de departamentos en Quito. Este hecho ha levantado sospechas sobre la transparencia de la operación y la seriedad del contrato.
Falta de experiencia y plazos incumplidos: Alarmas encendidas
Además, la falta de experiencia demostrada por los contratistas y los incumplimientos de los plazos en los contratos anteriores han generado alarma en el sector energético. A pesar de la emergencia, expertos insisten en que es fundamental cumplir con los procesos legales y realizar una investigación exhaustiva antes de firmar acuerdos millonarios. No obstante, el gobierno parece haber depositado una confianza excesiva en estas empresas, lo que ha resultado en la entrega de más de 160 millones de dólares en anticipos sin garantías claras sobre la efectividad de los generadores o su llegada a Ecuador.
Silencio y falta de transparencia: ¿Quién está detrás de estos contratos?
A pesar de los intentos de contactar a los responsables de las empresas involucradas, la única respuesta obtenida fue la del gerente de ATM en Ecuador, Alberto Breiton, quien luego dejó de responder a las solicitudes de entrevista. Esta falta de comunicación y transparencia solo ha incrementado las dudas sobre el futuro de estos contratos, dejando a los ciudadanos con más preguntas que respuestas sobre la situación energética del país.
