La inestabilidad política y el bloqueo social de comunidades paralizan las inversiones petroleras
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Ministro de Energía reconoce reticencia de inversionistas en Ecuador.
En declaraciones recientes, el Ministro de Energía y Minas, Fernando Santos Alvite, ha reconocido que los inversionistas son reacios a invertir en Ecuador por la falta de certidumbre en el país. Dijo que no hay garantía de continuidad del gobierno, lo que ha llevado al fracaso de numerosas subastas y que la producción ha quedado muy por debajo de lo presupuestado.
Santos Alvite explicó que los inversionistas están preocupados por el estado actual de las cosas en Ecuador, ya que ha habido un aumento de las actividades ilegales, y esto puede convertirse en algo habitual. El daño, según el Ministro, no es solo económico sino que también daña la reputación del país.
Además de los intentos de desestabilización, hay conflicto social en varios bloques petroleros. Las licencias para campos como el campo Amistad (gas), el campo Sacha y otros 22 campos petroleros que no producen están en línea para la subasta, y la falta de confianza de los inversionistas está creando un ambiente estancado y casi inmóvil.
Rolando Merino, ingeniero petrolero y exfuncionario de Petroecuador, comentó que los procesos son cada vez más complicados y la meta del gobierno de duplicar la producción petrolera cada vez es más lejana.
El Ministro también admitió que es poco probable que se alcance la meta de producción presupuestada de 520.000 barriles por día. La producción actual se sitúa en 460.000 barriles por día, y en el mejor de los casos rondaría los 490.000 barriles por día.
Además, los daños causados por la paralización de cuatro manzanas por conflictos con comunidades indígenas han sido significativos. Ya se han recuperado dos bloques (bloques 43 y 61), mientras que las negociaciones continúan por los bloques 12 y 16. Sin embargo, el daño ya está hecho y no se produjeron aproximadamente 2 millones de barriles de petróleo, lo que resultó en la pérdida de aproximadamente $ 128 millones del presupuesto estatal a principios de 2023.
La situación incluso ha generado preocupación en el Fondo Monetario Internacional (FMI). Durante la última reunión del FMI con Santos Alvite, la pregunta principal fue si el actual nivel de conflicto e inestabilidad sería la norma a partir de ahora.
Finalmente, en el campo Ishpingo, dentro de la ITT, la situación se ha vuelto más complicada por el desencanto del campo. Cuando comenzaron las operaciones el 13 de abril de 2022, las expectativas eran altas, ya que se esperaba que las reservas en Ishpingo duplicaran las de los otros dos campos de ITT. Sin embargo, cuando comenzó la perforación, se descubrió que el petróleo estaba mezclado con una sustancia similar al alquitrán, lo que reducía la producción efectiva. Se necesitan miles de millones de dólares para superar estas condiciones adversas y extraer petróleo crudo para la exportación. Sin embargo, las limitaciones establecidas por la ley y la falta de atracción de inversiones extranjeras debido a la inestabilidad y el conflicto exacerban aún más el problema.